jueves, 29 de julio de 2021

Meme 29/07: Al fin matamos al mamut

 

 

Video: Los 7 hábitos de los ciclistas más exitosos (Opinión de expertos) | SOLAENBICI

 

 

Fuente: SOLAENBICI

 

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Rusia fue vetada de las Olimpiadas, ¿por qué está por todos lados?

 

 

Fuente: https://www.nytimes.com

Por: Tariq Panja cubre algunos de los rincones más oscuros de la industria deportiva mundial. También es coautor de Football’s Secret Trade, una denuncia sobre la multimillonaria industria del comercio de jugadores de fútbol. @tariqpanja

 

TOKIO — Para ser un país con un veto oficial de las Olimpiadas, Rusia tiene bastante presencia en estos Juegos Olímpicos de Tokio.

Tomemos como ejemplo la ceremonia inaugural del viernes. Una delegación significativa de rusos marchó en el desfile de las naciones —justo detrás de San Marino y antes de Sierra Leona— bajo el cartel de COR, el acrónimo del Comité Olímpico Ruso. Es la etiqueta oficial con la cual más de 330 atletas rusos están compitiendo aquí, un poco de prestidigitación disciplinaria requerida a causa de los castigos impuestos después de los recientes escándalos de dopaje en los que se vio involucrado el país.

En los días que han pasado desde que marcharon orgullosos en el estadio olímpico ubicado en el centro de Tokio, los atletas rusos han competido en decenas de deportes ataviados con los colores nacionales de Rusia: desde tiro con arco hasta clavados, desde esgrima hasta gimnasia y desde tenis hasta taekwondo. El domingo, Rusia incluso obtuvo su primer oro. Veinticuatro horas más tarde, recogió dos más.

“De hecho, no se siente como si estuviéramos vetados”, admitió esta semana un periodista ruso.

Sin embargo, las multas son reales y tienen su origen en uno de los peores escándalos de dopaje en la historia del deporte: una campaña de años para cambiar muestras contaminadas de dopaje por muestras limpias —y luego encubrir las maniobras— que a la postre involucró a decenas de deportes y más de 1000 atletas, decenas de entrenadores y autoridades deportivas, e incluso miembros de los servicios de seguridad del Estado.

En un inicio, Rusia fue suspendida durante cuatro años de los deportes a nivel mundial, pero ha dedicado años a buscar la anulación —o como mínimo la reducción— de su castigo. En diciembre, obtuvo al menos una victoria parcial cuando el Tribunal de Arbitraje para el Deporte favoreció en gran parte la apelación de Rusia, primero al reducir dos años el veto que impuso la Agencia Mundial Antidopaje y luego al hacer que el camino de Rusia a las Olimpiadas fuera mucho menos oneroso del que había exigido el organismo encargado de sancionar el dopaje.

Las consecuencias: han viajado más atletas rusos a Tokio de los que fueron a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016 y hay una percepción de que las sanciones al país parecen estar abiertas a interpretación. Una razón podría ser que el Comité Olímpico Internacional (COI) —el cual a menudo ha evitado las sanciones directas a Rusia— ha responsabilizado a federaciones deportivas individuales de interpretar sus dos páginas de lineamientos sobre las medidas punitivas, entre las cuales hay un edicto que dice: “Todas las demostraciones públicas del nombre de la organización participante deben usar el acrónimo ‘COR’, no el nombre completo ‘Comité Olímpico Ruso’”.

En pronunciamientos públicos, los organizadores del evento, entre ellos el COI, rompieron esa regla casi de inmediato y en repetidas ocasiones. Por ejemplo, en la ceremonia de inauguración, el nombre de Rusia se leyó en inglés, japonés y francés mientras decenas de miembros de su equipo entraban en el estadio.

Un día después, el primero de la competencia de judo, Irina Dolgova de Rusia fue anunciada como miembro del COR, cuando se encaminó a su encuentro de primera ronda en la categoría de 48 kilogramos. Unas horas más tarde, sus compatriotas del equipo masculino de voleibol, vestidos en uniformes rojos, fueron presentados como el Comité Olímpico Ruso.

Para los pocos espectadores y periodistas presentes, hubo pocas señales de que el equipo representaba a una nación castigada. Un periodista de Kenia expresó su confusión en torno al acrónimo, cuando preguntó en voz alta por qué el equipo ruso que se acababa de anunciar estaba representado como COR en el marcador.

Así ha sucedido en la mayoría de los recintos: COR en los letreros y en los monitores, pero Rusia o Comité Olímpico Ruso en los anuncios oficiales. La confusión en torno al nombre del equipo a veces también ha confundido a las autoridades deportivas: por ejemplo, en su compilación de los resultados para los eventos clasificatorios de mujeres, la federación de gimnasia de Europa borró un tuit publicado el domingo en el que se hacía referencia al equipo como Rusia.

“Se están cumpliendo las reglas y depende de la situación particular”, duhi el domingo Mark Adams, un vocero del COI. “Según nuestra interpretación, se está interpretando de manera correcta”.

Cuando se le preguntó por qué se podía decir el nombre completo del equipo en voz alta, pero no mostrarlo, Adams dijo que el “medio” dictaría el mensaje. “Creemos que nos sentimos cómodos con lo que se está haciendo”.

Algunos han expresado su malestar por la presencia de Rusia. La Agencia Mundial Antidopaje todavía está dolida por la forma en que el Tribunal de Arbitraje Deportivo suavizó su sanción original, que —de haberse mantenido intacta— habría supuesto una presencia rusa significativamente menor en Japón, y unos colores de uniforme que habrían hecho que la procedencia del equipo no fuera identificable.

“Verán claramente lo que pedimos y lo que obtuvimos”, dijo el director general de la AMA, Olivier Niggli, a los periodistas la semana pasada. “Si se fijan en lo que pedimos, no es lo que obtuvimos, especialmente cuando se habla del uniforme”.

“Pero lo que tenemos aquí está en línea con la decisión del tribunal.No es lo que queríamos, pero es lo que tenemos y está en línea con lo que es aceptable”, añadió.

Las autoridades rusas prepararon a sus atletas para escuchar preguntas incómodas sobre su presencia en Tokio antes de que llegaran a los Juegos Olímpicos. Todos los participantes recibieron una guía de respuestas para preguntas relacionadas con política, temas sociales y el veto por dopaje, informó este mismo mes Vedomosti, un medio informativo de Rusia.

Según el documento, la mejor respuesta era ignorar las preguntas. Y así ha sido el caso: hasta ahora, los atletas rusos en Tokio en su mayoría se han abstenido de comentar sobre el tema de su estatus en Tokio.

Sin embargo, Rusia no ha podido controlar todo. A las autoridades y los atletas les disgustó el veto a la bandera de Rusia y algunos, como Alena Tiron, la capitana de su equipo de rugby, prometió que haría todo lo posible para que la reconocieran como rusa.

“Si no está permitida la bandera, nosotros seremos la bandera”, declaró Tiron a RIA Novosti, agencia administrada por el Estado. “Sabemos qué país representamos”.

Mientras que el Comité Olímpico Internacional se ha sentido cómodo con la palabra “ruso” resonando por los altavoces en referencia al Comité Olímpico Ruso, fue menos complaciente cuando el equipo de natación artística del país solicitó que “Con Rusia desde el amor” formase parte de su rutina. Se les dijo que se podía utilizar la canción, pero que habría que cortar la palabra “ruso”.

La elección de la música que se interpretará durante las ceremonias en las que participen los medallistas de oro rusos es otro punto de acuerdo. El Comité Olímpico Internacional rechazó la primera opción de Rusia, “Katyusha”, una canción militar popularizada durante la Segunda Guerra Mundial, y en su lugar se decidió por una parte del Concierto para Piano Número 1 de Tchaikovsky.

Los acordes de ese himno temporal se escucharon por primera vez el domingo, cuando Vitalina Batsarashkina subió al podio tras ganar la primera medalla de oro del COR, en la prueba femenina de pistola de aire comprimido de 10 metros.

Las incómodas adaptaciones tal vez terminen pronto. Después de las Olimpiadas de Tokio y los Juegos Olímpicos de Invierno a celebrarse en febrero en Pekín, Rusia estará más cerca de regresar al redil deportivo. Los campeonatos de voleibol del próximo año se llevarán a cabo en Rusia. Los de taekwondo están programados para realizarse en el país un año después.

Y aunque ha enfrentado censuras y sanciones, Rusia ha aumentado con discreción su influencia en los deportes. En la actualidad, tres federaciones olímpicas de los juegos de verano —tiro deportivo, boxeo y esgrima— son dirigidas por rusos, la mayor cantidad en la historia.

 

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lunes, 26 de julio de 2021

Meme 26/07: Quiero que resuelvan esto como adultos

 


 

 

40 Consejos cortos para un 10k épico

 

 

Fuente: https://runfitners.com

 

¿Quieres correr los mejores 10 km de tu vida? ¿Tienes 5 minutos para descubrir los 40 consejos que te ayudarán a tener unos 10k épicos? Sigue leyendo!! La diferencia entre una mala, buena y excelente carrera está en los pequeños detalles, y en este artículo te daremos  40 consejos cortos para un 10k ÉPICO.  

CONSEJOS PARA LA SEMANA PREVIA A LOS 10K

.- Qué comer antes de correr los 10 k

1.- Come y bebe con inteligencia. Utiliza alimentos nutritivos.

2.- No pruebes alimentos/bebidas nuevas. Continúa con tus hábitos alimenticios normales.

3.- Consume espinaca y cerezas (alimentos que te ayudarán a reducir la inflamación posterior a la carrera).

4.- Asegúrate de mantenerte hidratado.  En las carreras de 10k, es mucho mas importante la hidratación previa al evento, que la que puedas realizar mientras corres. 

.- Como entrenar para un 10k

5.- Corre menos. Reduce tu kilometraje aproximadamente un 50/60% de tu kilometraje habitual.

6.- Intenta que los entrenamientos más largos e intensos de la última semana, sean en los primeros 3 días y los últimos 4 sean los más livianos.

7.- Camina poco. Cuida tus piernas. 

.- Tips de máximo rendimiento

8.- Aplica hielo en zonas resentidas y masajes en todas tus piernas.

9.- Cuando estés en tu casa, recuéstate con las piernas en alto.

10.- Mira videos motivadores para llegar con energía positiva al máximo (el Espíritu del Maratón es una película ideal).

11.- Duerme más horas (especialmente 48/72 horas antes de la carrera). 

.- No te olvides de la logística de carrera

12.- Lava tu camiseta y short. Chequea el pronóstico para preparar diferentes opciones.

13.- Planifica tu estrategia de carrera. Analiza el recorrido

14.- Define tu plan nutricional para los días previos y para el día de la carrera.

15.- Compra todos los ingredientes que vayas a necesitar.

16.- Verifica el estado de tus zapatillas (chequea que no estén dañadas, ni tengan objetos que puedan dañarte).

17.- Establece un punto de encuentro con tu familia y amigos. 

EL DÍA DE LA CARRERA 

.- Tips para antes de SALIR DE TU CASA

18.- Coloca el chip y el dorsal.

19.- Prepara la ropa que utilizarás antes y después de la carrera.

20.- Desayuna e hidrátate correctamente.

21.- Visita el baño para evitar sorpresas

22.- Si vas a pasar un par de horas esperando el inicio de la carrera , lleva ropa extra para abrigarte.

23.- Verifica el pronóstico del tiempo de las horas de la carrera para asegurarte de vestirte correctamente. Si va haber lluvia, lleva alguna bolsa o similar para evitar mojarte en la previa

24.- Prepara una mochila con las cosas que necesitarás antes de la carrera y después (sepáralas en dos bolsas diferentes). Verifica que haya servicio de guardarropas para guardar la mochila mientras corres.

25.- No consumas anti-inflamatorios como el ibuprofeno/diclofenac. 

.- Qué hacer antes de empezar la carrera

26.- Visita el baño nuevamente.

27.- Revisa tu estrategia de carrera.

28.- Aplica vaselina o lubricante en las zonas de riesgo de rozaduras y ampollas.

29.- Concéntrate y recuerda controlar tu ritmo en los primeros kilómetros. 

.- Qué hacer durante los 10k

30.- Intenta cumplir tu estrategia de carrera.

31.- Sé paciente al mantener un ritmo constante (no aceleres y pases corredores a lo loco).

32.- Si hay viento, posiciónate detrás de un grupo de corredores para reducir la resistencia del viento.

33.- Corre de forma relajada. Evita la tensión de tus músculos del rostro, hombros y brazos.

34.- Cuidado en la largada. Muchos accidentes pasan por los empujones previos. 

.- Como recuperarte después de los 10k

35.- Apenas termines la carrera trata de seguir caminando durante 5-10 minutos para permitir que tus piernas se enfríen.

36.- Cambia tu ropa rápidamente, abrígate.

37.- Coloca hielo en cualquier punto de dolor. Recuéstate con tus piernas hacia arriba mientras te hidratas y alimentas.

38.- Aunque no sientas apetito, consume hidratos de carbono y proteínas de fácil y rápida digestión que sabe que de acuerdo con su estómago.

39.- Coloca las medias de compresión.

40.- Disfruta y celebra tu logro.

 

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Podcast El Maillot Semanal #182: Carapaz, la locomotora dorada

 

 

Dirección llevada a cabo por Juan Clavijo. Comentarios de David García y Daniel Montes. 

Podcast: El Maillot Semanal  


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¿Por qué algunos atletas olímpicos restringen su flujo sanguíneo?

 

 

Fuente: https://www.nytimes.com

Por: Matthew Futterman es un veterano periodista deportivo y autor de dos libros, Running to the Edge: A Band of Misfits and the Guru Who Unlocked the Secrets of Speed y Players: How Sports Became a Business. @mattfutterman

 

Cada cuatro años, las Olimpiadas le muestran al mundo el método más reciente de entrenamiento o recuperación que han usado los mejores atletas.

En 2016, muchos nadadores tenían marcas de círculos rojos en la piel a causa de la “terapia de ventosas”, una antigua práctica china que involucra succión en los músculos y tendones adoloridos.

Este año, parece que lo que está de moda son los torniquetes.

No, no hay un estallido de heridas. Sin embargo, el nadador estadounidense Michael Andrew usa bandas parecidas a torniquetes en la piscina de práctica. Galen Rupp, el defensor de la medalla de bronce en la maratón, a veces se amarra bandas similares en las piernas durante los entrenamientos.

Ellos son algunos de los atletas de élite que se han vuelto discípulos de una práctica conocida como restricción del flujo sanguíneo, que es exactamente como suena: cortar el flujo de sangre de ciertos músculos durante periodos limitados para mejorar los efectos del entrenamiento y estimular la recuperación.

La práctica se ha puesto en boga justo a tiempo para los Juegos Olímpicos de Tokio, y muchos piensan que es un reconocimiento al trabajo de Yoshiaki Sato, un exlevantador de pesas japonés que la desarrolló en 1966.

Durante la mayor parte de su vida adulta, Sato, de 73 años, ha perfeccionado y difundido esa técnica con la cual ha creado una pequeña fortuna al convertirse en una versión japonesa de Jack LaLanne. Sato ha creado una práctica y una serie de productos llamados Kaatsu que están orientados a la restricción del flujo sanguíneo. Sato sigue practicando la restricción del flujo sanguíneo todos los días y ahora está maravillado por la atención que está recibiendo.

“Siempre fue cuestión de tiempo”, dijo este mes en una entrevista desde su casa en Fuchu, un suburbio de Tokio. “Pero no pensé que tardaría tanto”.

En años recientes, la restricción del flujo sanguíneo ganó un importante defensor del otro lado del Pacífico con Jim Stray-Gundersen, un médico e investigador especializado en medicina deportiva que ha trabajado de cerca con las organizaciones olímpicas de Estados Unidos y Noruega.

En esencia, Stray-Gundersen creó la estrategia “vive alto, entrena bajo” del entrenamiento en altura, según la cual se les receta a los atletas dormir y vivir arriba de 2400 metros sobre el nivel del mar para aumentar la producción de los glóbulos rojos que transportan el oxígeno y luego bajar miles de metros a entrenar para no exigirle demasiado al cuerpo.

A inicios de la década pasada, Stray-Gundersen entrenó con Sato y se le llegó a conocer como el “maestro del Kaatsu” antes de que cada quien tomara su propio camino. Luego, en 2016, Stray-Gundersen creó sus métodos personales de restricción del flujo sanguíneo y una empresa llamada B Strong.

“Puedes tener los beneficios de nadar 10.000 metros nadando alrededor de 1000”, comentó recientemente.

Andrew, una estrella en ascenso de 22 años que nadará en tres eventos individuales y participará en los relevos en Tokio, mencionó que hace cinco años comenzó a experimentar con la restricción del flujo sanguíneo después de que Chris Morgan, un veterano entrenador de natación, lo animó a hacerlo.

Andrew a menudo se amarra las bandas en los brazos durante las carreras cortas de 25 metros e intenta lograr los mismos tiempos que cuando no las usa.

“Claro que es muy difícil”, dijo Andrew en una entrevista de este mes. “Pero estás simulando una sensación de dolor verdadero que engaña al cuerpo para que se regenere”.

El nadador entró en una pequeña relación de negocios con la empresa de Sato después de usar sus productos durante años (si un cliente usa el código de Andrew, Kaatsu dona el 20 por ciento de la venta al club de natación de Andrew).

Antes y después de entrenar y competir, Andrew se amarra un dispositivo en lo alto de cada pierna, luego aumenta y disminuye la tensión del torniquete en intervalos regulares —como un tensiómetro— para estimular el flujo sanguíneo y recuperarse. A veces, usa las bandas en la sala donde se preparan los nadadores antes de dirigirse al borde de la piscina para una carrera.

No todo el mundo se ha sumado a la tendencia. Dave Marsh, quien ha entrenado a varios nadadores para las Olimpiadas y está a cargo del equipo de Israel en Tokio, comentó que uno de sus atletas había usado la restricción del flujo sanguíneo para recuperarse y rehabilitarse de una lesión, pero que todavía no la recomendaría para entrenar.

“La primera labor de un entrenador es no hacer daño”, mencionó Marsh. “Desde mi punto de vista, con la restricción del flujo sanguíneo un atleta podría dar un paso hacia atrás”.

Cuando un colega le contó que la restricción del flujo sanguíneo les estaba ayudando a sus atletas a aumentar en dos semanas la masa muscular que normalmente aumentaban en seis, como cualquier buen científico del deporte, Stray-Gundersen quiso ver los datos. Resultó que había un artículo del año 2000 publicado en Journal of Applied Physiology, cuyos autores eran Sato y unos científicos de institutos de investigación de Japón.

En pocas palabras, según el artículo, la restricción del flujo sanguíneo provocaba una respuesta inmensa desde el cerebro para acelerar el proceso normal de reparación y reconstrucción del tejido dañado.

Cortar el flujo sanguíneo y luego dejarlo fluir puede estimular al cerebro para que use más poderes curadores de los que este normalmente pensaría que necesita.

Desde la publicación de ese estudio, varios investigadores independientes han confirmado los beneficios potenciales de la restricción del flujo sanguíneo durante el ejercicio. En la actualidad, Shawn M. Arent, presidente del Departamento de Ciencias del Ejercicio en la Universidad de Carolina del Sur, realiza un estudio sobre sus efectos para el Departamento de Defensa.

Arent comentó que las primeras tendencias sugerían que la práctica se podía usar de un modo más eficiente cuando los atletas quisieran bajar su carga de entrenamiento sin sacrificar el estado físico, ya fuera mientras se encuentran tranquilos antes de la competencia o, al final de una temporada, mientras se recuperan de una lesión.

“Es un buen suplemento para el entrenamiento; no es todo el entrenamiento”, agregó Arent. “Ofrece un estímulo psicológico cuando otras cosas pueden tener un alcance limitado”.

Sato dijo que descubrió accidentalmente los beneficios de la restricción del flujo sanguíneo hace más de 50 años, durante una ceremonia budista en un templo japonés que lo obligó a sentarse en el suelo en la posición seiza —rodillas dobladas con los talones bajo el trasero— durante largos períodos. Las pantorrillas y los dedos de los pies empezaron a sentir un cosquilleo, y al cabo de 45 minutos ya no podía soportar el dolor. Cuando se puso de pie, vio que sus pantorrillas se llenaban de sangre, y sus piernas se sentían como durante un entrenamiento.

Sato pensó que tal vez hubiera alguna conexión entre el corte del flujo sanguíneo a los músculos y el entrenamiento de los mismos. Empezó a atarse cinturones de karate y, más tarde, cámaras de aire de bicicleta alrededor de las piernas y realizó una serie de experimentos, comprobando cuánto crecía la circunferencia de sus muslos y pantorrillas incluso cuando realizaba menos repeticiones.

En 1973, Sato se rompió el tobillo mientras esquiaba y restringió el flujo sanguíneo a la zona durante la rehabilitación, dejando que entrara periódicamente. Una recuperación que los médicos le dijeron que podría durar cuatro meses tardó poco más de uno.

“Presión arriba, presión abajo”, dice. “Se entendieron los beneficios tanto para el entrenamiento como para la recuperación”.

Para alguien como Andrew, quien nada miles de metros al día; Rupp, cuyo régimen incluye más de 100 kilómetros por semana más entrenamiento de peso y trabajo de abdomen; el lanzador de los Mets de Nueva York Noah Syndergaard; la campeona esquiadora Mikaela Shiffrin o cualquier otro atleta de élite que haya empezado a incorporar la restricción del flujo sanguíneo, la técnica permite reducir la probabilidad de una lesión repetitiva por esfuerzo y acelerar el tiempo de recuperación.

Para Andrew, la parte más importante de la técnica podría ser la fe ciega que le tiene. Como lo sabe cualquier científico del deporte, los placebos a menudo pueden ser tan fuertes como una droga.

“Nadé algo así como 18 carreras en siete días en las pruebas y me sentí fresco”, mencionó Andrew. “Estoy seguro de que eso sucedió porque fui muy disciplinado con la recuperación. La usé todo el tiempo”.

 

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jueves, 22 de julio de 2021

Meme 22/07: Tú tóxica, yo tóxico

 


 

 

El hábito pandémico que no debemos perder

 

 

Fuente: https://www.nytimes.com

Por: Jane Brody es columnista de Personal Health, un puesto que ha tenido desde 1976. Ha escrito más de una decena de libros incluyendo los éxitos de ventas Jane Brody’s Nutrition Book y Jane Brody’s Good Food Book.

 

Después de un año de lavarme las manos de manera obsesiva durante 20 segundos cada vez que tocaba algo de fuera de mi casa, creo que debí haberme abastecido de crema de manos, no de papel higiénico, al comienzo de la pandemia. Desde luego, no fue un buen momento para que CVS dejase de comercializar mi producto favorito, la crema hidratante Healthy Hands, que pudo haber evitado que mi piel pareciera papel de lija durante todos estos meses.

No obstante, no me arrepiento de esta costumbre que, junto con el uso constante de cubrebocas y el distanciamiento social, me ayudó a mantenerme sana y salva mientras las olas de COVID-19 azotaban la ciudad de Nueva York. No solo me mantuve libre del coronavirus, sino que ni siquiera tuve un resfriado a pesar del ejercicio diario al aire libre y de los paseos con el perro y de mi obstinada negativa a dejar que otros me hicieran las compras.

Ahora que parece que mucha gente se ha resfriado en las últimas semanas al volver al mundo y bajar la guardia, es un buen recordatorio de que no debemos abandonar los hábitos de lavado de manos que aprendimos durante la pandemia.

En promedio, nuestras manos entran en contacto con cientos de superficies al día, lo que las expone a cientos de miles de microorganismos. Afortunadamente, la mayoría son inofensivos. Sin embargo, tomando en cuenta que nos tocamos la cara alrededor de 16 o más veces por hora, sin una higiene de manos adecuada, nos arriesgamos a introducir un organismo infeccioso no tan inofensivo, incluida la variante delta del coronavirus, en nuestra boca, nariz u ojos.

El año pasado, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, y casi todos los especialistas en salud pública, insistieron en repetidas ocasiones que lavarse las manos con agua y jabón durante al menos 20 segundos, o utilizar un desinfectante de manos a base de alcohol cuando no se dispone de agua y jabón, es la primera línea de defensa contra la propagación de la COVID-19.

La agencia recomienda utilizar agua corriente limpia (tibia o fría), jabón común (no antibacteriano), hacer espuma y luego frotar las manos, por delante, por detrás y entre los dedos. Después de 20 segundos de espuma, hay que enjuagar bien las manos para eliminar la suciedad y los gérmenes y minimizar la irritación. A continuación, se secan al aire durante 20 segundos o se utiliza una toalla limpia para secarlas; las manos mojadas son vectores de transmisión de gérmenes.

Antes de la COVID-19 y de los consiguientes recordatorios de la importancia de una buena higiene de las manos, las costumbres estadounidenses de lavado de manos dejaban mucho que desear. En una encuesta en línea realizada en 2012 a mil adultos estadounidenses representativos a nivel nacional, el 71 por ciento de los encuestados dijo que se lavaba las manos “con regularidad”, sin importar lo que eso signifique (¡quizá solo una vez al día!). El 58 por ciento dijo que había visto a otros salir de un baño sin lavarse; más de la mitad dijo que no se lavaba después de estar en el transporte público, usar equipos compartidos o manejar dinero, y el 39 por ciento (muy probablemente una subestimación burda, basada en la observación personal) admitió no lavarse después de estornudar, toser o sonarse la nariz.

Ni siquiera el personal sanitario ha sido siempre diligente. Un equipo de Gran Bretaña y Australia publicó el año pasado en la revista Journal of Clinical Nursing: “Como enfermeros, somos conscientes de que el lavado de manos no siempre se ha tomado tan en serio como debería y el cumplimiento y la adherencia en los entornos clínicos distan mucho de ser óptimas con el paso del tiempo”. Según múltiples informes de diferentes países, antes de la COVID-19, el cumplimiento de las directrices sobre la higiene de las manos entre las enfermeras solo alcanzaba, en promedio, un 40 por ciento, señaló el equipo.

“Aunque se trata de una tarea sencilla que salva vidas, lamentablemente no siempre se lleva a cabo”, escribieron. Instaron a que la actual atención al lavado de manos impulsada por la COVID-19 se mantenga en todas las comunidades, así como entre los profesionales de la salud, “cuando la pandemia haya terminado”.

Lavarse las manos después de ir al baño es una recomendación universal, por buenas razones. Se ha demostrado que reduce la incidencia de la diarrea hasta en un 40 por ciento. El coronavirus puede transmitirse a través de las heces y un solo gramo de heces humanas puede contener un billón de gérmenes.

Es probable que tus padres y profesores te hayan enseñado a lavarte las manos antes de comer. A menudo recuerdo un divertido intercambio que presencié en casa de una amiga hace años. Cuando llamó a su hijo de 4 años para cenar y le dijo que se lavara las manos, éste fue directamente al fregadero de la cocina. “Ahí no, en el baño”, le dijo la madre exasperada, a lo que el niño respondió: “¿Esto es un fregadero o no?”.

La tradición judía exige lavarse las manos antes de la bendición que da comienzo a una comida, y durante el Seder de Pascua, las manos se lavan dos veces: una antes de comer la verdura amarga sumergida en agua salada y otra antes de bendecir el matzo. El Talmud afirma: “Cualquier alimento que se sumerja en un líquido requiere lavarse las manos antes de comerlo” porque el líquido podría contaminarse y transferir un organismo nocivo al alimento.

Los musulmanes, a los que se les dice que deben estar limpios antes de presentarse ante Dios, también realizan un ritual de lavado de manos. Cada mano (entre otras partes del cuerpo) debe lavarse tres veces antes de las oraciones.

Sin embargo, los cirujanos son los que más se llevan el premio al lavado de manos en la actualidad. Los guantes quirúrgicos no existían cuando el cirujano del siglo XIX Joseph Lister, cuyo nombre fue adoptado por el producto Listerine, demostró que la desinfección preoperatoria era la clave para prevenir las infecciones en las heridas quirúrgicas. El lavado de manos con jabón y agua caliente, a menudo con un cepillo, durante cinco minutos se convirtió en protocolo aceptado a finales del siglo XIX.

Sin embargo, la introducción de los guantes estériles no hizo irrelevante la limpieza exhaustiva de las manos por parte de los cirujanos. Después de una operación, se ha demostrado que alrededor del 18 por ciento de los guantes tienen pequeños pinchazos que los cirujanos no perciben en más del 80 por ciento de las ocasiones. Y, cuando una operación dura dos horas, es probable que más de un tercio de los guantes de los cirujanos tengan agujeros.

Por eso, cualquier persona que pueda tocar el campo quirúrgico debe lavarse hasta los codos y debajo de cada uña durante cinco minutos para reducir el riesgo de contaminación. El objetivo es eliminar los microorganismos que habitan en las manos e inhibir el crecimiento de bacterias debajo de los guantes del cirujano.

A los cirujanos les enseñan a utilizar agua tibia, que mejora la eficacia del jabón. Les dicen que eviten el agua muy caliente porque elimina los ácidos grasos protectores de la piel, una buena lección para todos nosotros.

En un artículo de opinión “La neurología del lavado de manos”publicado en marzo en Medpage Today, James Santiago Grisolia, médico del Hospital Scripps Mercy de San Diego, describió el lavado de manos como una especie de sedante neurológico. “Lavarse las manos resuena a un nivel profundo en nuestro cerebro, al hacer sonar notas profundas que nos hablan de actuar con cuidado y de la integridad en un mundo sucio y a veces peligroso”, escribió.

Para minimizar el tedio de mirar el reloj o contar hasta 20 cada vez que se lavan las manos, los expertos sugieren cantar dos veces la canción del “Cumpleaños feliz” para lograr una limpieza completa. Sin embargo, Grisolia, al citar un descenso en la tasa de natalidad a causa de la pandemia de COVID-19 y el hecho de que en menos de un año la pandemia se extendió por todo el mundo, sugirió que un mantra más oportuno podría ser cantar el estribillo de “It’s a Small World (After All)”.

 

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Meme 22/07: Humanos antes

 

 

Podcast El Maillot Semanal: Especial Juegos Olímpicos | La cumbre del deporte

 

 

¡Programa especial para hablar de los JJOO de Tokio 2020 (¡2021!) Hablamos del ciclismo en el mayor evento deportivo celebrado alrededor del mundo: los Juegos Olímpicos. Una prueba totalmente impredecible y con un recorrido muy exigente, en el que las subidas al Monte Fuji (14,5 km. al 6%) y el Mikuni Pass (6,8 km. al 10,1%) definirán los tres ciclistas que sumarán una medalla para su país.

Podcast: El Maillot Semanal  


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sábado, 17 de julio de 2021

Meme 17/07: Salí a trotar a la 5 am. con un neumático a la cintura

 


 

RFI: La caramañola. Un desecho para los ciclistas, un trofeo para los seguidores

 

 

Escuchar el poscast de RFI aquí: La caramañola. Un desecho para los ciclistas, un trofeo para los seguidores

Por: Ana María Ospina

 

Tour de Francia 2021 marcado por la hegemonía del esloveno Tadej Pogacar y por la obligación al pelotón de lanzar sus desechos durante la etapa, en unas zonas designadas por la organización para minimizar el impacto ambiental de la carrera.

Alaphilippe, Pogacar, Quintana y otros favoritos del pelotón son llamados por los niños y adultos para que lancen sus caramañolas. “El que me escuche que me la tire”, se entiende decir entre la multitud que se bate por este trofeo: un termo utilizado en carrera.

En tres años, Jorge Ramírez, un colombiano residente en Suiza, ha recuperado 14. “Yo las desinfecto, las lavo con agüita caliente y después las uso porque yo también practico el ciclismo”, explica emocionado mientras muestra el altar que su esposa le tiene en casa, una licorera en la que hay más botellas de equipos que de alcohol.

Una de las estrategias para recuperar estas botellitas es ubicarse al lado de las zonas de recolección de desechos, único lugar habilitado para que el pelotón lance sus caramañolas así como los residuos de los alimentos que consumen durante la etapa.

Hay cinco u ocho zonas reglamentadas dependiendo de los kilómetros a recorrer. Ocupan entre 300 y 500 metros delimitados por dos carteles a la entrada y a la salida.

La Unión Ciclista Internacional volvió obligatoria estas zonas en sus carreras a partir de abril de este año, sin embargo el Tour de Francia las implementó desde hace una década.   

Karine Bozzacchi, responsable del desarrollo sostenible ASO, empresa organizadora de la ronda gala: “El Tour se realiza al aire libre, en medio de la naturaleza, la que debemos proteger. Los ciclistas tienen la necesidad de botar las botellas así como los otros residuos de comida y eso lo facilitamos con estas zonas.

Al principio lo acogieron bien porque les facilitamos que se deshagan de sus desechos. Lo que les preocupa es no poder tirar nada fuera de estas zonas porque a veces, si hace mucho calor necesitan hidratarse, entonces cargan más termos. Si los tiran fuera de zona se arriesgan a tener sanciones de tiempo en la clasificación, económicas, incluso la exclusión después de tres advertencias.

Tienen otra solución: todos los vehículos de la carrera tienen la orden de recibir los residuos que los ciclistas les entreguen. Los cambios son siempre complicados pero hay poco a poco van tomando los reflejos adecuados", puntualizó Karine Bozzacchi.

Cada zona de recolección es limpiada por dos personas al final de la jornada. Se recolectan entre una y dos bolsas de 110 litros que van a la basura municipal mientras que el público bien ubicado parte con su caramañola.

 

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jueves, 15 de julio de 2021

Meme 15/07: No se, ultimamente estoy sintiendo que la gente espera mucho de mí

 


 

 

¿Quieres controlar tu peso? Levantar pesas podría ayudarte

 

 

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Levantar pesas un par de veces a la semana podría ayudarnos a prevenir la obesidad, según un nuevo e interesante estudio sobre el ejercicio de resistencia y la grasa corporal. Esta investigación muestra que quienes completan ejercicios de entrenamiento muscular de cualquier tipo tienen de un 20 a un 30 por ciento menos probabilidades de llegar a ser obesos que las personas que no los hacen, independientemente de si practican ejercicios aeróbicos o no.

Los hallazgos indican que el entrenamiento con pesas podría ser más relevante para el control de peso de lo que muchos esperábamos y levantar un poco de peso nos podría ayudar a no subirlo después.

La incidencia de obesidad en Estados Unidos está al alza, pues alrededor del 40 por ciento de los adultos cumplen con los criterios estandarizados para ser considerados obesos. Se prevé que esa cifra aumente a más de un 50 por ciento para fines de esta década.

Por desgracia, pocos de nosotros perderemos los kilos de más que ya tenemos. La mayoría de las personas que pierde más del cinco por ciento de su peso corporal lo recupera a los cinco años.

Por eso, es posible que la manera más eficaz de tratar la obesidad sea previniéndola. Y hacer ejercicio con frecuencia ayuda bastante. Muchos estudios muestran que la gente que camina con frecuencia o que hace actividades como correr, andar en bicicleta, nadar o practicar algún ejercicio aeróbico suele subir menos kilos al envejecer que las personas sedentarias, y tiene menos riesgo de llegar a ser obesa.

Sin embargo, no se tiene tanta información sobre si los ejercicios de entrenamiento con pesas también influyen en el peso. Algunas investigaciones pasadas sugieren que el entrenamiento de resistencia ayuda a que las personas retengan masa muscular cuando intentan bajar de peso. Pero no queda muy claro si también podrían controlar la subida de peso a largo plazo y prevenir la obesidad.

Así que, para el nuevo estudio, publicado en junio en PLOS Medicine, un grupo de investigadores de la Universidad Estatal de Iowa en Ames, Iowa, y otras instituciones, decidieron estudiar la posible relación entre las pesas y la circunferencia de las personas. Al inicio, se abocaron a la base de datos, que es grande y muy útil, compilada por el Aerobics Center Longitudinal Study, un famoso proyecto que había realizado un seguimiento del estado médico, de salud y la condición física de decenas de miles de pacientes que visitaron la clínica Cooper en Dallas entre 1987 y 2005. Los hombres y mujeres se sometieron a numerosas pruebas durante sus visitas recurrentes a la clínica.

En esta ocasión, los investigadores de Iowa usaron los registros de más o menos 12.000 de los participantes, la mayoría de los cuales eran de mediana edad. Ninguno era obeso cuando se unió al Aerobics Center, según su índice de masa corporal, o IMC (esta medida calcula de manera indirecta la grasa corporal según la altura y el peso de la persona. Puedes calcular tu IMC aquí).

Estos hombres y mujeres habían completado la típica serie de mediciones de salud y estado físico durante sus visitas a la clínica y también llenaron un cuestionario de ejercicio que indagaba, entre otras cosas, en el entrenamiento con pesas. Se les preguntaba si hacían “ejercicios de fortalecimiento muscular” y, en caso afirmativo, con qué frecuencia y durante cuántos minutos a la semana.

Después, los investigadores empezaron a cotejar los datos, comparando los pesos y otras medidas de las personas entre cada visita a la clínica. Usando el IMC como medida, alrededor del siete por ciento de los hombres y mujeres se habían vuelto obesos en los seis años siguientes a su primera visita a la clínica.

Pero el IMC es una aproximación poco precisa de la constitución corporal y no siempre es una medida exacta de la obesidad. Por eso, los investigadores también examinaron los cambios en el grosor de la cintura y el porcentaje de grasa corporal para determinar si se habían vuelto obesos. Según el criterio de un diámetro de cintura superior a 100 centímetros para los hombres y 90 para las mujeres, o un porcentaje de grasa corporal superior al 25 por ciento para los hombres y el 30 por ciento para las mujeres, hasta el 19 por ciento de los participantes desarrollaron obesidad con el paso de los años.

Sin embargo, los investigadores descubrieron que el levantamiento de pesas cambió esos resultados, pues redujo de modo considerable el riesgo de que alguien pudiera ser obeso, sin importar qué parámetro de medición usaran. Los hombres y las mujeres que declararon haber fortalecido sus músculos varias veces a la semana, durante un total de una o dos horas semanales, tuvieron un 20 por ciento menos de probabilidades de padecer obesidad con el paso de los años, en función del IMC, y un 30 por ciento menos, en función del grosor de la cintura o del porcentaje de grasa corporal.

Los beneficios no cambiaron cuando los investigadores controlaron las variables de edad, sexo, tabaquismo, la salud general y ejercicio aeróbico. La gente que hacía algún ejercicio aeróbico y levantaba pesas tenía muchas menos probabilidades de llegar a ser obesa. Pero lo mismo ocurría con los que solo levantaban pesas y decían hacer poco o casi nada de ejercicio aeróbico.

Los resultados sugieren que “puedes obtener muchos beneficios de levantar pesas, aunque no lo hagas mucho”, afirma Angelique Brellenthin, profesora de kinesiología en la Universidad Estatal de Iowa, quien estuvo a cargo del nuevo estudio.

Desde luego, la investigación fue observacional y no demuestra que el entrenamiento de resistencia prevenga el aumento de peso, solo que ambos factores están relacionados. Tampoco consideró la dieta, la genética ni los hábitos de salud de las personas, los cuales podrían incidir en el riesgo de padecer obesidad.

Tal vez lo más importante es que no nos dice cómo influye el fortalecimiento muscular en el peso, aunque es probable que el entrenamiento de resistencia aumente y mantenga la masa muscular, indica Brellenthin. Al ser un tejido activo en términos metabólicos, el músculo quema calorías y aumenta de manera leve nuestra tasa metabólica. Curiosamente, el efecto deseable de añadir masa muscular también puede explicar por qué menos levantadores de pesas se consideraban obesos cuando los investigadores utilizaron el IMC como medida. El IMC no distingue el músculo de la grasa, señala Brellenthin. Si se añade músculo al cuerpo con el entrenamiento de pesas, el IMC puede aumentar.

Sin embargo, el mensaje principal del estudio es que es probable que un poco de entrenamiento con pesas ayude a controlar el peso, a la larga. “Así que mi consejo sería incorporar algunos ejercicios de resistencia antes o después de que salgas a tu caminata diaria”, sugiere Brellenthin. O inscríbete a un gimnasio o clase en línea. O prueba una rutina sencilla de resistencia que puedas hacer en casa, como el ciclo de ejercicios de 7 minutos de pie.

 

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